Mujer de juventud


Han pasado ya tantos años
que evocarte me resulta inútil,
frágil, insulso, despiadado.
Ayer al fin tuve noticias de ti
y sé que me guardas un rencor
doloroso, casi eterno
y me siento muy abrumado.
He vuelto a recordar tantas tardes
de café, cigarrillos y problemas
nunca resueltos, siempre
descubriendo lo que amamos.
Sí los recuerdos son implacables
como fragmentos de dolor en la
madrugada de un enfermo,
como espadas que atraviesan
un corazón de hiel amargo
sintiendo desesperanza por
la ausencia del ser amado.
Anoche pensé en ti
y descubrí que las mariposas
de antaño fueron fugaces,
enormemente eternas en su
desdicha, sutilmente condenadas
al desamor por lo añorado.
Quisiera decirte tantas cosas,
mujer de juventud, princesa
antigua de mi esencia y mi
remanso de hombre cansado,
pero ¿ Quién es el hombre ?
¿Quién la mujer?
¿Quiénes los inocentes?
Una historia perdida en el tiempo,
unas vidas asoladas por tanto mal
como nostalgia esta mañana.
Sí, yo me fui de tu lado,
y solo espero algún día
ser feliz sintiéndome por ti,
¿Si quieres?, Perdonado.



Comentarios

Entradas populares